Lápiz de Grafito

Los lápices de gráfito nos ofrecen una amplia variedad de durezas de acuerdo a sus diferentes grados. Su calidad se mide a partir de sus dos principales componentes: la mina debe ser compacta para evitar que se rompa fácilmente y la madera debe tener suavidad y estar convenientemente seca para no romperse al sacarle punta al lápiz.

Las mayores durezas de estos lápices son conocidas con la letra "H" (6H hasta H), por otra parte los mas blandos son conocidos con la letra B (HB a 9B), encontrándose ocasionalmente hasta el 20B. Los lápices blandos se recomiendan para usos más artísticos, que requieran mayor cantidad de recursos expresivos, en cambio los más duros se usan para trabajos más técnicos.

También podemos encontrar el grafito en barra, el que permite obtener una gran versatilidad en los trazos, esto se debe a que no se encuentra cubierto por madera.

Los trazos de grafito de lápices blandos, permiten la intervención de la yema del dedo para lograr efectos de dfuminado, recurso que será fundamental cuando nuestro dibujo requiera describir cualidades como luces y sombras, o algunos aspectos que requieran de mayor expresividad.